LÓPEZ Obrador, lo peor de la crisis sanitaria

Como todos sabemos, desde hace cosa de algunos días, el mundo se ha visto afectado y alterado por una enfermedad: la influenza porcina, que al parecer, se expandió desde la Ciudad de México (aunque el virus parece ser originario de Asia).

El mundo ha reaccionado de diferentes maneras: algunos países le prestan atención y apoyo al gobierno de México (encabezado por Felipe Calderón Hinojosa). Entre estos países está Estados Unidos. Otros, como los gobiernos de Argentina y China han tomado medidas extremas y francamente imprudentes, cargadas de satanización hacia los mexicanos (China, además, ha maltratado a ciudadanos mexicanos que viajaron a ese país, violando incluso sus derechos humanos).

Pero lo peor de todo, no es la actitud infantil de esos países, sino la falta de solidaridad de algunos destacados nacionales hacia las medidas (necesarias) de Felipe Calderón. Uno de esos oportunistas y electoreros mexicanos es Andrés Manuel López Obrador (el ex candidato del PRD a la presidencia de la república, el mismo que se negó a reconocer su derrota y que bloqueó durante algunos meses el Paseo de la Reforma; el mismo individuo que endeudó a la capital del país, que se rodeó de lo peor del PRI y que descalificó a la ciudadanía, que en junio de 2004 realizó una marcha contra la delincuencia).

López Obrador ha aprovechado la actual crisis sanitaria para descalificar al gobierno federal y así, llevar agua a su molino y a sus muy particulares intereses políticos (los cuales, espero, se vean afectados).

AMLO empezó por afirmar que el gobierno había creado un escándalo, que según el, solo provocó una reacción de pánico. Pero entonces, habría que preguntarle: ¿Y como tenía que reaccionar el gobierno de México? ¿Ocultando la información para "evitar el pánico"? Por lo visto, eso da a entender el señor López Obrador.

Habría que seguir la estupidez del gobierno chino de hace algunos años, cuando ocultaron la información por una epidemia que hubo en ese país, y que causó varios muertos cuando esa enfermedad salió a la vista de todos y el gobierno dictatorial de China ya no tuvo mas remedio que aceptar publicamente la situación. Esa actitud deshonesta la cambió el actual gobierno de México, que reconoció publicamente el problema y que tomó medidas necesarias (drásticas y hasta antieconómicas, pero muy necesarias para cortar la cadena de contagio). Esa actitud debe, a mi parecer, ser apoyada por las personas que deseamos que esta situación no empeore. Y no tiene nada que ver con el partido que esté en el poder. Se puede ser antipanista, e incluso anticalderonista, pero lo que no se debe de hacer, es escatimar reconocimientos al presidente, que actuó de manera abierta, drástica y necesaria.

Claro que ya sabemos que la solidaridad es una palabra que el señor López Obrador desconoce, o que solo la desea cuando se trata de el. No es la primera vez que este sujeto hace lo mismo: llevar agua a su molino para sus intereses, a costa de la unión del país. Recordemos que cuando Tabasco estuvo sometido a inundaciones hace algunos meses (no recuerdo bien la fecha) el señor ex Jefe de Gobierno del D.F estuvo entre los que solo hicieron ruido para descalificar a todos, sin aportar algo a favor de la solidaridad a Tabasco.

Pero esto no es todo. Además, el señor López Obrador afirmó que por culpa de Calderón quedamos "apestados en el exterior". Que cinismo y que mentiroso. Es verdad que algunos países han tomado medidas extremas que ofenden al pueblo mexicano, pero eso no es culpa de Calderón, sino de la actitud cerrada e infantil de esos gobiernos. Si de verdad Calderón fuera el causante de eso, todos los países estarían haciendo lo mismo respecto a México. Y ya hemos visto que no es así, pues el gobierno de Obama le ha prestado apoyo a Calderón, y lo mismo han hecho Canadá y hasta el papa. Además, si nos fijamos bien en las palabras del Peje, entonces exculpa al gobierno chino de las violaciones a los derechos humanos cometidos contra mexicanos (como enviarlos a un hotel de quinta categoría). Practicamente, el señor Peje le ha dado un espaldarazo a ese gobierno dictatorial. Y pensar que ese es el hombre que habla de democracia y derechos humanos.

Creo, en lo personal, que el gobierno de Calderón hizo lo necesario y lo correcto, a pesar de individuos de escasa moral, como el señor López Obrador. Por otro lado, esta actitud de López Obrador podría dividir mas al PRD, toda vez que las medidas que ha tomado el gobierno federal han sido respaldadas hasta por Marcelo Ebrard Casaubón, el actual Jefe de Gobierno del D. F.

Lo único que esperan muchos, es que estas declaraciones cínicas y absurdas de López Obrador terminen por sepultarlo mas. Dicen que de las cosas malas algo bueno queda, o mejor dicho, algo positivo deja. El hundimiento político de la imagen del AMLO servidor del pueblo si que sería una muy buena herencia de la crisis sanitaria.